Hace un par de días me encontré esta imagen por
internet y me hizo pensar en todo lo
aprendido a lo largo de este camino que decidí emprender hace casi cuatro años,
cuando la vida me dijo o cambias o te jodes.
Y creo que una de las cosas más difíciles para aprender fue esta, fue
muy duro para mi asimilar este proceso, porque es que a mí me enseñaron a ser
buena y no a ser feliz ,a estar para ayudar todo el tiempo porque eso es lo que
hace la gente buena, a dar consejos y a solucionarle la vida a los demás , como
una ambulación para estar disponible ante cualquier emergencia , a no
conformarse solo con escuchar el problema sino a buscar la manera de resolver como
diera lugar de resolverlo, en otras palabras los asuntos sin resolver de otros se convirtieran
en los míos.
Gracias a mi
terapia y a mi trabajo personal me llevo a entender y comprender que ese era el
peor error que podía cometer, que era más el daño que causaba que la ayuda que
prestaba, que cada quien tiene que recorrer su propio camino y aprender lo que
tenga que aprender en el momento en que lo tenga que aprender , lo sé es difícil
cuando ves sufrir a tus seres queridos por las decisiones que han tomado o porque van tan rápido
en la vida que no se toman el tiempo de aprender de sus propios errores y
vuelvo a cometerlos de una u otra forma mil veces más, a veces somos como
perritos dando vueltas buscando morder la cola, otras tantas simplemente le
agarramos cariño a esa piedra y no salimos o simplemente estamos en hueco y seguimos cavando .
El punto es que cuando yo ayudo a alguien , cuando
soluciono su problema por él o cuando en gran medida le digo lo que debe hacer
para salir, estoy retrasando enormemente su crecimiento personal, estoy
coartando su derecho a aprender y muy probablemente disminuyendo en gran medida la posibilidad de
que ese error no se comenta en un futuro próximo, además esta personas
convierte en dependiente de mí , porque si ya lo ayude a resolverlo una vez
podre hacerlo mil veces más, lamentablemente de lo malo que nos sucede aprendemos,
maduramos, crecemos echamos pa´lante, con lo bueno no se crece. El dolor es un
gran maestro, el sufrimiento es innecesario y opcional, preocuparse no resuelve
ocuparse sí.
Cada quien tiene su propio ritmo de
aprendizaje y avanza cuando está preparado para hacerlo, muchas veces
intentamos que otras personas vean la realidad que esta ante sus ojos pero por
alguna extraña razón que no entendemos esa persona no lo ve, nos frustramos y
llenamos de emociones negativas que no contribuyen en nada ni a nuestro desarrollo
ni al de la persona en cuestión y es simplemente porque aún no está preparada
para descubrir lo que hace tanto nosotros sabemos, tal vez por miedo, por dolor
o por mil razones las cuales no debemos entender simplemente aceptar.
Entonces en vez de ir por la vida ayudando a todo el
mundo que en realidad es un daño terrible, es mejor acompañar en el proceso
hacer sentir a nuestros seres queridos que estamos allí para escuchar, para
apoyar, para dar un abrazo de cariño sincero pero no para opinar, resolver y
manejar las situaciones como nosotros creemos que es lo correcto, porque no
solo inutilizas a la personas también le quitas el maravilloso privilegio de
hacerse responsable de los actos que comete, lo haces menos consciente, menos
humano, convirtiéndonos en un gran obstáculo en su crecimiento de vida.
Comentarios
Publicar un comentario